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Cómo elegir el lugar perfecto para tu boda
Cada boda refleja el alma de la pareja. O al menos, este es el resultado final que todos los recién casados desearían conseguir.
Mucho depende de la elección del lugar de celebración, un factor que puede influir inmediatamente en la organización de la recepción. Si buscas un lugar que combine el encanto, la comodidad, la hospitalidad y un alto grado de personalización, una boda en una finca para bodas en Ávila es la mejor opción para quienes desean una boda memorable y de gran impacto.
Si está pensando en una finca cerca de Madrid para celebrar tu boda, en este artículo de la mano de algunas wedding planner, te guiaremos por las numerosas ventajas de este tipo de lugares, teniendo en cuenta los distintos aspectos organizativos.
El encanto único de una boda en una finca
Organizar una recepción o incluso casarse en una finca tiene un encanto que otros lugares difícilmente pueden igualar. Los entornos históricos encierran siglos de belleza, pero en general las fincas siempre guardan grandes sorpresas para todos los huéspedes.
Siempre has querido un lugar único para tu boda, pero ¿por qué deberías elegir una finca?
La primera razón es la más importante: por imposible que parezca, hay una finca para todos los gustos. La variedad de este tipo de lugares es infinita, por lo que se adapta a muchos estilos y arreglos diferentes.
Desde la clásica finca con más de 200 años de historia, suntuosa y rica en sus frescos y jardines, hasta contextos más modernos, con grandes y verdes céspedes y quizás una espléndida piscina para hacer mágicos los momentos más importantes. Hay fincas que se prestan a opciones rurales o románticas, sencillas u opulentas: tendrás mucho donde elegir.
Las bodas en fincas tienen una versatilidad única, por lo que puedes adaptar cada aspecto a tu sueño, aprovechando las excelentes características que ya poseen estos lugares.
Además, no olvides que cuando se trata de fincas, se trata de espacios muy amplios, así que no pongas límites a tus deseos: ¡tú boda será tal y como la imaginaste!
Los espacios disponibles para una boda en una finca
En las fincas históricas, los interiores suelen caracterizarse por grandes salones que pueden acoger a más de 160 personas sentadas cómodamente a la mesa.
Sin embargo, también hay algunas fincas que ofrecen espacios más pequeños y acogedores, para ser configurados de forma personalizada y dedicados a grupos más pequeños de huéspedes.
Como alternativa a los suntuosos salones históricos, muchos de estos lugares ofrecen también un granero en los espacios adyacentes: un contexto más aireado e informal, adecuado para quienes prefieren tener una finca como telón de fondo y organizar la recepción en un espacio más sencillo.
Hasta ahora hemos hablado de espacios cerrados, pero elegir una finca significa también tener muchas posibilidades en el exterior: grandes jardines, parques centenarios, patios evocadores, pequeños tesoros escondidos en el jardín.
Así, una finca también puede ser la opción ideal para quienes quieren coronar su sueño de amor rodeados de elementos naturales, con arreglos personalizados en cada detalle y exactamente en tu lugar favorito de toda la finca.
¿Te parecen estas características adecuadas para tu boda? No olvides que tu toque personal es esencial para que todo el evento sea perfecto. Cojines, asientos, velas, farolillos, adornos florales y mucho más: no hay que dejar nada al azar para que pueda vivir su más bello sueño.
Cómo organizar tu boda en una finca
Si has decidido que una finca es el lugar perfecto para tu boda, pasemos ahora a algunos consejos para organizar este gran evento. Son muchos los aspectos de los que hay que ocuparse, pero con un equipo profesional a tu lado, te resultará más fácil gestionarlo todo.
- Empecemos con los diferentes momentos que tendrán lugar en la finca. De hecho, muchas de estas localidades también ofrecen la posibilidad de celebrar la boda en su interior, con iglesias consagradas para las celebraciones religiosas o con un permiso municipal para las uniones civiles. Por lo tanto, a nivel organizativo, es importante tener claro si la finca acogerá también la ceremonia y saber desde el principio si el lugar que se desea cuenta con los permisos necesarios.
- Ahora puedes empezar a pensar en la boda. El consejo es empezar por la elección del servicio de catering, que se encargará del menú, el acondicionamiento, la iluminación y la gestión de los espacios. Con un único interlocutor podrás dar forma a tus deseos, desde la comida del banquete de bodas hasta el mobiliario, desde los detalles dedicados a la acogida de sus invitados hasta la organización de las celebraciones nocturnas.
- El montaje es quizás el punto más delicado. Si quieres organizar tu boda de forma independiente, tienes que saber qué ofrece la finca: desde las mesas y sillas hasta los elementos decorativos y la iluminación. Todo resulta más sencillo si, por el contrario, cuentas con el apoyo de profesionales cualificados, que te proporcionarán todo lo necesario para organizar tu recepción y personalizar el montaje con un estilo preciso.
Nunca subestimes este servicio, porque muchas veces el hacerlo tu mismo puede resultar aún más caro: no sólo en términos económicos, sino también en cuanto al resultado final.
- Otro consejo importante es aprovechar al máximo los espacios de la finca para crear una boda que deje a todos boquiabiertos. Empieza por tus lugares favoritos del lugar y asigna a cada uno un momento especial. De este modo, podrás crear una boda dinámica que no deje lugar al aburrimiento ni a la pérdida de oportunidades.
- Por último, recuerda organizar lo mejor posible las diferentes áreas dedicadas. Hoy en día, son muy populares las zonas infantiles, para que los más pequeños puedan divertirse con entretenimiento profesional (y tranquilizar a sus padres).
Sin embargo, ¿por qué no centrarse también en los adultos y en sus pasiones? Si al novio y a sus amigos les gusta brindar con un buen whisky, organiza un rincón dedicado a ello. Del mismo modo, si a la novia y a las demás mujeres les gustan los pequeños dulces y las golosinas, piensa en montar un show cooking especial, para hacer aún más dulce tu evento.
Una boda en una finca es un sueño hecho realidad.
